Por Pedro Oller, Ricardo Vargas y Andrés Araya

La realidad económica del mundo ha cambiado.

El desequilibrio y la imposibilidad de hacer frente a las deudas y pasivos en general, ha obligado a muchos empresarios y comerciantes a enfrentar situaciones empresariales inminentes con ocasión del COVID-19, los mismos requieren opciones legales para el eventual rescate de sus empresas ya no sujetas a crédito, dentro de estas el “Convenio Preventivo”.

Esta figura como su nombre lo indica, es un acuerdo entre una empresa deudora o en cesación de pagos y sus acreedores para hacer frente a sus obligaciones dinerarias, por ejemplo: solicitar un mayor plazo a sus acreedores o un pago parcial de la deuda pendiente con ciertas condiciones que permitan a la empresa operar en la transición a una eventual normalidad de operaciones.

Su finalidad es darle opciones a una empresa que atraviesa una crisis económica, para que logre “salir a flote”, evitando la declaratoria de quiebra.

Oller Abogados cuenta con abogados que han atendido estos escenarios. En materia comercial tienen capacidad de asesorar a su empresa brindándole herramientas y conocimientos para afrontar y prevenir las consecuencias jurídicas de una crisis económica que está afectando fuertemente el sector productivo de nuestro país.

¿Por qué esperar a que el problema se salga de control cuando se puede tener control sobre el problema?

Los principales interesados en este tipo de acuerdo son los deudores que se encuentren en una posición complicada para el pago de sus obligaciones en general, pero que a su vez deseen encontrar una forma alternativa de cumplir con sus acreedores. Oller Abogados acompaña a sus clientes durante todo el proceso: presentación, aprobación, ejecución y finalización.

Costa Rica se encuentra a las puertas de una Ley Concursal, normativa específica para este tipo de situaciones de crisis empresarial, estos mecanismos preventivos constituyen la ruta a seguir para los empresarios que deseen tomar las medidas preventivas necesarias para evitar caer en bancarrota y quiebra, y por ende la desaparición del negocio comercial.

Ante estas situaciones de riesgo, se destaca la importancia de una asesoría jurídica preventiva, dinámica, multidisciplinaria y especializada como la que brindan nuestros profesionales. Así valoramos todos los escenarios y herramientas mientras se ejecutan de la mejor manera los mecanismos que la ley contempla.